La noticia de que los dos
pistoleros ciegos se habían desafiado a muerte vació de gente las calles de la
ciudad. No había un alma a la vista, ni siquiera detrás de las ventanas. Pero
si hubiera sido necesario, muchos habrían pagado entrada por ver de cerca lo
que -sin lugar a dudas- tendría más de espectáculo circense que de mero ajuste
de cuentas. Tal era la curiosidad que aquel duelo singular despertaba en todo
el mundo. Porque, aunque nadie lo admitiera públicamente (por respeto), la
posibilidad de que el enfrentamiento acabara con un solo disparo era más bien
remota. De ahí su atractivo.
Texto finalista mensual en el II Microconcurso de la
biblioteca Esteve Paluzie (Barberà del Vallès – 2013)
Como para andar por allí. Me ha gustado Pedro. Feliz Año Nuevo. Abrazos de estreno. Marta
ResponderEliminarAbrazos compartidos, Marta. Feliz año también para ti
EliminarUn escenario atractivo ver balacearse a dos ciegos.
ResponderEliminarYo creo que es atractivo considerando que ambos asumen un rol más allá de sus limitaciones, claro. Gracias por tu visita, Carlos.
EliminarSeis meses más tarde siguen disparándose, aunque cada uno en un pueblo distinto. A pesar de que la mortandad es cuantiosa, la gente les ha cojido cariño.
ResponderEliminarMe encantan sus provocaciones, mi querido amigo.
Es verdad, esa podría ser una elipsis válida: no dar nunca el duelo por concluído. Siempre agudo en tus comentarios, Josep, y siempre dispuesto a dejarte provocar. Petons a la família.
EliminarEnhorabuena Pedro, por esta distinción, por este micro, por este duelo que podría acabar con un solo disparo.
ResponderEliminarUn saludo indio
Mitakuye oyasin
Bien observado, David. Yo daba por hecho que llevaría su tiempo, pero tu planteas un final tanto o más emocionante. Un placer, verte por aquí. Abrazos.
EliminarLlego , quizá, a tiempo de no ser vista pero sí contemplar desde la mirilla, guiño de discreción antes de la pública negación...
ResponderEliminarUn saludo de luz, a la velocidad de las balas..
Claro que llegas a tiempo, mujer de la mariposa azul (¿se llaman "Morpho"?). Gracias por el balazo de tu comentario. Tomo nota de tu bitácora para echarle un vistazo.
EliminarNo hay nada más atractivo que aquello que podría... no pasar. Qué bien escribes, felicidades.
ResponderEliminarUn saludo
No sé si es lo más atractivo, pero suele ser irresistible. Muchas gracias por leerme, Geus. Un abrazo.
EliminarTe leo y sonrío. Pero, ¡qué requetebién escribes, Pedro Herrero!
ResponderEliminarVengo desde el blog de Josep...
ResponderEliminarHoy he visto la noticia de un grupo de ciegos conduciendo - en un circuito cerrado -
He sonreido con la noticia y con tu historia
Saludos
Luna